La productora rural de 9 de Julio, dirigente de la Federación Agraria Argentina y presidenta de Mujeres Rurales Argentinas, Patricia Gorza, advirtió en diálogo con Todo Provincial RADIO que la situación en la región noroeste bonaerense es crítica e inmutable desde hace nueve meses, y cuestionó duramente la falta de obras hidráulicas y la respuesta insuficiente del Gobierno nacional ante las inundaciones que paralizan la producción agropecuaria.
Gorza explicó que la situación en los distritos de la Pampa Húmeda —entre ellos 9 de Julio, Carlos Casares, Pehuajó, Bolívar y 25 de Mayo— no muestra cambios significativos desde hace meses. “Acá no hay pendiente, entonces si no hay máquinas trabajando, puede pasar una semana o dos y nada cambia”, detalló.
La dirigente se mostró en desacuerdo con la idea de que solo resta esperar que el sol evapore el agua acumulada: “Eso sería estar en 1810. Desde el sector productivo no podemos permitir estar a la deriva del tiempo. Si no se hacen obras que alivien la situación y mejoren los caminos, cuando llegue marzo y las lluvias de otoño, vamos a entrar a 2026 con la misma complejidad que hoy. Esto es una fábrica a cielo abierto y la tenemos cerrada”.
Gorza advirtió que el quebranto económico ya es altísimo. “Podés hablar con cualquier gerente del Banco Nación de 9 de Julio y te va a decir que la cantidad de cheques rechazados es atroz, más que en 2001. No tiene que ver con la cultura del país, sino con la coyuntura económica local. Hace nueve meses que tenemos la fábrica cerrada y nos estamos comiendo el capital para pagar gastos corrientes”.
“La obra del Salado es la llave que abre todas las puertas”
La dirigente rural insistió en que la solución estructural depende de la finalización de la obra de dragado del Río Salado y la construcción del Nodo Bragado. “Sin esa obra terminada, todos los que estamos aguas arriba no tenemos manera de escurrir los excesos. Si canalizáramos el agua sin ese nodo, inundaríamos la ciudad de Bragado”, explicó.
Actualmente, según Gorza, solo dos dragas trabajan en el río, lo que hace prever que “al ritmo actual, les va a llevar varios meses o hasta un año completar el tramo”. Además, indicó que recién después de eso podría iniciarse la obra del Nodo Bragado, que “si tuviese todos los recursos y la decisión política, tardaría un año y medio en hacerse”. En ese escenario, advirtió que “recién en dos años podríamos tener alguna solución aguas arriba. Estamos pensando ya en la próxima inundación”.
“Todos llegaron tarde, pero el que más tarde llega es el Gobierno nacional”
Consultada sobre la reciente visita de Patricia Bullrich y los anuncios oficiales, Gorza fue tajante: “Tarde llegaron todos. La provincia llegó tarde, pero hace tres meses que está; el municipio también reaccionó tarde. Nadie estuvo a la altura. La reacción del Gobierno nacional tuvo que ver con la presión mediática y la visibilización del problema”.
Sobre los 1900 millones de pesos anunciados como ayuda económica, explicó que “no eran para los cinco distritos más afectados, sino para dividir entre 19 distritos de toda la provincia. Cuando hacés la cuenta, eso es poco más que una cisterna de combustible por municipio. Es un fondo muy insuficiente ante la magnitud del desastre. Con esto no tenemos ni para empezar”
“Hasta ahora no se recibió ningún tipo de ayuda. La intendenta María José Gentile ni siquiera logró que desde Nación la atendieran. Entre los anuncios y la realidad hay una distancia enorme. La decepción de los productores es muy grande”, subrayó.
“Nos mandan dos excavadoras y una ambulancia: con eso no alcanza”
Gorza detalló el equipamiento prometido por Vialidad Nacional y el Ejército Argentino: “De Vialidad vienen tres camiones volcadores, dos motoniveladoras y dos excavadoras con sus carretones. Del Ejército, un cargador frontal, una retroexcavadora, una ambulancia 4×4 y un camión Unimog. Agradecemos, pero no son necesarios los vehículos sanitarios; lo que necesitamos son máquinas para trabajar”.
Además, remarcó que los costos de alojamiento y viáticos de los operarios corren por cuenta de los municipios o los propios productores. “Nos organizamos para conseguirles viviendas y comida. Pero la ayuda es mínima: 9 de Julio tiene 14 cuarteles y el 80% de la red vial colapsada. Este equipamiento apenas alcanza para mantener los accesos de dos localidades, La Niña y Morea”.
La dirigente reveló también que las máquinas no permanecerán 120 días, como solicitaron los productores, sino “solo un tiempo breve, sin plazo definido”. “Lo sentimos realmente como una tomada de pelo. Sería más sincero que digan que no van a hacer nada. No es justo jugar con la ilusión de la gente que está desesperada”, enfatizó.
“Es como darle un ibuprofeno a alguien en terapia intensiva”
“Esto es como que estés en agonía y te den un ibuprofeno. Es totalmente inentendible la insensibilidad del Gobierno nacional. La gente del campo la está pasando muy mal: son años de trabajo que se los lleva una inundación. Muchos pequeños y medianos productores van a quedar fuera del sistema y venderán sus campos a grandes grupos o a gente de afuera”, advirtió Gorza.
Por último, se refirió al fondo hídrico nacional, que se nutre del 3% del impuesto a los combustibles. “Cada vez que alguien carga nafta o gasoil, ese dinero va al Fondo Hídrico Nacional. Es una recaudación constante, no es que la plata no está. Pero el dinero está inmovilizado en un fondo de inversión del Banco Nación. Esto no es un problema de plata, es un problema político. Hay una decisión de que no es prioridad, de decir ‘arréglense como puedan’”, concluyó.