Tras 24 años de proceso, la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal de Dolores condenó, en juicio oral y público, a 6 años de prisión de cumplimiento efectivo en inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos al ex comisario Tomas Antonio Freites (67) por “omisión dolosa (con intención) de evitar la tortura”.
Esto se dio en el marco de la causa que investigó el asesinato, en Chascomús, del adolescente Emilio Blanco (17).
Gustavo López, el abogado de la familia Blanco, consideró muy satisfactoria “la calificación legal, que fue uno de los ejes y preocupación de nuestro trabajo”.
Sostuvo que “es un buen legado de la causa, los padres y la familia de Emilio que, en este departamento judicial, la tortura esté involucrada como un precedente, para distintos casos que han pasado y lamentablemente pasan donde hay funcionarios policiales involucrados”.
Insistió en que esta calificación “no es común y estamos ante un precedente muy valioso”.
La ventaja de que el tema tortura apareciera en la calificación tiene que ver, básicamente con delitos no que prescriben.
También es un aporte a la consideración de la violencia institucional, porque se zanjó “la delgada línea que divide apremios de tortura”.
Rescató el aporte de “que quede claro que gatillo fácil y violencia institucional son cosas distintas. Acá decididamente hubo violencia institucional, agravada por la condición de menor de la víctima”.
El resultado del juicio fue, para el abogado, el final de una dura batalla ,e la que “estaba la verdad, faltaba la justicia”. Sin embargo, puesto que la causa principal habla de una co-autoría y hay sólo un condenado como autor del homicidio, es presumible que haya otros autores.
Qué dijo el papá de Elías
Por su parte, Elías, padre de la víctima, se mostró satisfecho con el resultado de este juicio.
“Era lo que esperábamos, porque son muchos años que veníamos a tribunales y nos llevamos la satisfacción de que no trabajamos todos estos años en vano”, dijo.
Agradeció “el acompañamiento de toda la comunidad de Chascomús, que se ha puesto la causa al hombro”.
Finalmente Alejo, uno de los hermanos de Emilio que tenía 12 años cuando sucedió el crimen y ahora, recibido de abogado, colabora con la tarea del doctor López, expresó que “siempre dije que Emilio va a descansar en paz porque no hizo nada, pero los que vamos a estar más tranquilos ahora somos nosotros”.
24 años de aquel momento
Hay que recordar que, la noche del 27 de septiembre de 1997, Emilio Blanco, un joven de 17 años de Chascomús fue interceptado por personal policial del servicio de calle cerca de su casa, y a la mañana siguiente hallaron su cuerpo sin vida y con múltiples lesiones al costado de las vías del tren.
Desde un primer momento las actuaciones policiales pretendieron alimentar la versión de un accidente ferroviario, y la causa penal iniciada pasó por tres juzgados distintos y terminó en la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal de Dolores.
En 2011 condenó a prisión perpetua al ex jefe de calle de la Comisaría Primera de Chascomús, Fermín Basualdo, por el delito de homicidio agravado por alevosía.