Se trata de la banda liderada por los hermanos Gustavo y Sebastán Brancato de Pehuajó. Como la pesca clandestina de pejerrey es considerada apenas una contravensión, la justicia federal avanza con una causa por lavado de activos ya que la actividad mueve millones. En diversos allanamientos incautaron camionetas, embarcaciones, redes, dólares y 27 cajones de pejerrey sin refrigerar.
El pasado jueves, la justicia federal de Pehuajó ordenó un amplio operativo en el marco de una investigación por lavado de activos con dinero proveniente de la pesca furtiva, transporte y comercialización de pejerrey capturado con redes en lagunas de Trenque Lauquen, Berutti y Guaminí.
El operativo ordenado por la Fiscal Federal, Dra. María Mc Intosh y Juzgado Federal Junín a cargo de Héctor Pedro Plou fue llevado a cabo por personal de la DDI Trenque Lauquen con el auxilio de la Policía Comunal, CPR, Narcotráfico, técnicos de la Dirección de Control Pesquera y el municipio.
La investigación se inició hace al menos cuatro años a partir de denuncias de vecinos de Pehuajó sobre la actividad ilegal de fileteras no habilitadas que generan olores putrefactos, vertidos y sustancias derivadas de la pesca clandestina de pejerrey.
Los imputados son Gustavo y Sebastián Brancato, Cristian, Leandro y Carlos Zuccari, y Martín Crespo. Por el momento, la justicia no ordenó ninguna detención. En Pehuajó, los hermanos Brancato son conocidos pescadores furtivos que depredan las lagunas del noroeste bonaerense desde hace años.
La investigación pudo comprobar que el pejerrey capturado en forma ilegal es transportado y comercializado en el Mercado Central y también en Mar del Plata.
La docena de allanamientos se concentró en domicilios particulares, comercios y tres galpones donde funcionan las fileteras clandestinas.
Durante los procedimientos se inacutaron documentos que evidencian la compra de propiedades y bienes varios. Ahora buscan comprobar que los mismos fueron adquiridos con activos producidos de manera ilícita a través de la pesca.
Por orden de la justicia federal, los efectivos policiales secuestraron dos camionetas Toyota Hilux, una Ford 150, un utilitario Mercedes Benz Sprinter, un Volkswaguen Passat, un Vento, un cuadriciclo Yamaha YFZ 450cc., motocicletas Yamaha YZF y XTZ 250cc, motores naúticos, un bote semirrígido con tráiler, cinco gomones inflables, 33 bolsones con redes usadas y nuevas, 27 cajones repletos pejerrey sin refrigerar, dos motobombas de achique, tres grupos electrógenos última generación, pesos argentinos, dólares estadounidenses y dos armas de fuego.
Los profesionales convocados determinaron que el pescado decomisado nO resultaba apto para el consumo humano, por lo que se procedió a su destrucción mediante la quema.
En mayo pasado, el juez federal de Junín, Pedro Plou, había realizado operativos similares contra la pesca clandestina en el que dos empresarios de Trenque Laquen quedaron imputados por «lavado de activos» y «enriquecimiento ilícito».
En 2020, el intendente de Trenque Lauquen, Miguel Fernández, realizó una denuncia a partir de una publicación en redes sociales que acusaba a funcionarios municipales de percibir coimas para permitir “pesca indiscriminada”. El jefe comunal defendió a los miembros de su gabinete pero decidió recurrir a la justicia para disipar dudas.
Es importante señalar que la laguna Las Tunas es la única en la Provincia de Buenos Aires que tiene permiso de pesca comercial, lo que implica que desde el municipio se puede distribuir pejerrey en todo el país. En 2019 se inauguró la Planta Procesadora de Pescados “Beruti”, la primera filetera de laguna habilitada que permitirá circular carne de pejerrey en forma legal por el territorio bonaerense.
