La expresidente Cristina de Kirchner será indagada hoy en la causa por supuesto «encubrimiento agravado» a los ciudadanos iraníes prófugos por el atentado a la AMIA, en base a la denuncia en su contra presentada por el fallecido fiscal Alberto Nisman a raíz de la firma del memorando de Entendimiento entre Argentina e Irán.
Será la tercera citación de la flamante senadora electa en condición de acusada en una causa penal ante el juez federal Claudio Bonadio, que ya la procesó por el dólar futuro y el caso conocido como «Los Sauces» (lavado de activos de origen ilícito agravado, asociación ilícita y negocios incompatibles con la función pública).
Cristina llegará a las 10 a los tribunales federales de Retiro, cuatro días después de resultar electa senadora por la provincia de Buenos Aires, y deberá responder las imputaciones que le hizo Nisman en enero de 2015, volcadas en la denuncia que presentó el fiscal cuatro días antes de aparecer muerto con un balazo en la cabeza en su departamento de Puerto Madero.
El 14 de enero de 2015 Nisman acusó a la entonces Presidenta y a su canciller Héctor Timerman de haber ideado un «plan criminal orquestado y puesto en funcionamiento» con participación del resto de los acusados, que derivó en la firma del fallido memorando de Entendimiento con la República Islámica de Irán, y tuvo como fin último, según el fiscal, «dotar de impunidad» a los iraníes con captura internacional.
Cuatro días más tarde, Nisman apareció muerto y la justicia investiga si se trató de un homicidio o un suicidio; para peritos de la Gendarmería, se trató de un asesinato.
Para Nisman, la expresidente ordenó avanzar en un «plan de impunidad» y «sacrificando la Justicia en el caso AMIA» con tal de privilegiar intereses comerciales con Irán.
Para hoy se ordenó en Comodoro Py 2002 un operativo de seguridad que incluirá un doble vallado de custodia y restricciones de circulación en el cuarto piso, sede del juzgado de Bonadio, al que la ex presidenta llegará tras ingresar a tribunales como lo hizo en anteriores citaciones por otras causas, por una puerta lateral que da a la sede del Correo Argentino.
Esta será la tercera vez que la ex presidenta declare en indagatoria ante Bonadio, el magistrado que ya la procesó y envió a juicio oral en la causa por la venta de dólar futuro al final de su gobierno y en otra causa penal, «Los Sauces», como supuesta jefa de una asociación ilícita que lavó dinero ilegal obtenido en la obra pública a través de falsos alquileres de propiedades de su sociedad familiar.
En anteriores ocasiones, la senadora electa no respondió las preguntas del juzgado y entregó escritos, algo que podría repetirse ahora.
MIentras la expectativa está puesta en su indagatoria, la ex procuradora del Tesoro de la Nación Angelina Abbona y el diputado de la Cámpora Andrés Larroque rechazaron la acusación en su contra en la misma causa al presentarse ante el juez federal Claudio Bonadio.
La exfuncionaria habló en el juzgado y contestó preguntas, acompañada por su abogado Eduardo Barcesat, y luego fue el turno de Larroque, quien llegó a Comodoro Py con una nutrida columna de su agrupación y apoyado también por otros legisladores, como Axel Kicillof.
En el juzgado, Abbona admitió haber mantenido reuniones durante la negociación de la firma del Memorándum que fueron «reservadas pero no secretas » y estuvieron dentro de las funciones del organismo que presidió durante el kirchnerismo.
La ex Procuradora refirió que viajó a Ginebra a pedido de la entonces presidenta Kirchner para reunirse con enviados iraníes, en una reunión por el tema, y que luego de eso no se la volvió a consultar.
Por su parte, Larroque también declaró en el juzgado, y antes su abogada defensora, Lucila Larrandart, cuestionó la prueba y dijo no entender la acusación
Larroque explicó que votó en el Congreso por aprobar el memorando como parte de su labor como legislador, pero negó haber participado en su negociación.
Antes de ingresar a los tribunales dijo a la prensa que la causa es un «mamarracho».
Nisman acusó a la expresidenta, a su canciller Timerman, al titular del partido Miles Luis D’Elia, el entonces líder de Quebracho, Fernando Esteche, entre otros, de haber formado parte de un «sofisticado plan delictivo» para lograr que Interpol pusiera fin a las circulares rojas de captura internacional de cinco iraníes, algunos de los cuales alcanzaron altos cargos en el gobierno de ese país, que se busca indagar por el atentado del 18 de julio de 1994 que dejó 85 muertos en Pasteur 633.
La denuncia de Nisman estuvo dos años sin investigarse, envuelta en una batalla judicial desde que el juez federal Daniel Rafecas, primero en recibirla, la desestimó por inexistencia de delito hasta que la Cámara Federal de Casación ordenó reabrirla.
Para entonces, el juez Bonadio avanzaba en otra investigación iniciada posteriormente por supuesta «traición a la Patria» a raíz de una denuncia de dos abogados por hechos similares, y la Cámara Federal ordenó que quede al frente de ambas pesquisas.
El fiscal que llevaba la denuncia de Nisman, Gerardo Pollicita, pidió las indagatorias de Cristina Kirchner y los demás acusados y Bonadio las ordenó.
Cristina Kirchner está ya enviada a juicio oral en la causa por la venta de dólar futuro y también está procesada por fraude en la obra pública en Santa Cruz durante su gobierno; y enfrentará una nueva declaración indagatoria en la causa Hotesur a mediados de noviembre ante el juez federal Julián Ercolni.
Además la Cámara Federal porteña ordenó ayer al juez federal Sebastián Casanello que resuelva si debe ser llamada a indagatoria en la causa conocida como la «ruta del dinero K» por lavado de activos de parte de las empresas del detenido Lázaro Báez.