Septiembre arrancará con una sola comuna de la región -Coronel Suárez- en pleno conflicto salarial con sus trabajadores. Sin embargo, la situación podría agravarse, ya que la mayoría de los sindicatos municipales volverá a la carga durante este mes con el objetivo de cerrar una pauta anual acumulada del orden del 40%.

«Sí, prevemos un septiembre difícil», refirió a La Nueva. una fuente muy cercana a un jefe comunal del sudoeste bonaerense. La explicación es que el presupuesto municipal está al límite y poco se sabe de los montos de coparticipación que llegarán en el último cuatrimestre.

«Todos estamos más o menos igual», aseguró, y anticipó que la estrategia de los jefes comunales, en este contexto, será «retrasar las subas o pagarlas escalonadas en dos o tres meses».

Hasta el momento, la pauta salarial sólo está cerrada en Saavedra, Monte Hermoso y Puan, con porcentajes que van del 30% al 50%. En el resto de los casos, con mayor o menor conflictividad, todo está por definirse.

El caso más crítico es el de Coronel Suárez, donde los trabajadores se rebelaron frente a la conciliación obligatoria dispuesta por el ministerio de Trabajo. El secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM), Rubén Allende, anunció que, además de continuar con marchas y asambleas en el lugar de trabajo (lo que resiente los servicios), iniciarán acciones legales contra el Ejecutivo por presuntos aprietes a los empleados en conflicto.

“Sabemos que han tenido un auxilio financiero y tienen dinero suficiente para darnos ahora el aumento que ofrecen para enero del 2017”, se quejó.

En lo que va del año, la suba salarial ronda el 28%; el gremio reclama llegar al 40%.

El intendente Roberto Palacio ha pedido al STM reanudar las negociaciones a partir de esta semana, bajo el argumento de que recién en estos días se tendrá una idea de la pauta de coparticipación.

Negociaciones

En Coronel Pringles también consideran que septiembre será «un mes clave», ya que el Ejecutivo prometió reabrir las paritarias si la inflación superaba el 35%.

El año comenzó en este distrito con la entrega de sumas fijas de 350 pesos, durante marzo y abril, para quienes cobraran menos de 8 mil pesos (por encima de esta cifra, percibieron sumas fijas de 175 pesos). En mayo vino la segunda mejora, pero apenas fue el pase al básico de la bonificación que se había concedido en 2015, del orden del 10% del salario básico.

En lo que va del segundo semestre, se concedió una suba del 7% en julio, lo que se repetirá en septiembre, así como bonificaciones de 500 pesos mensuales durante julio, agosto y septiembre.

Fuentes sindicales confiaron que no descartan medidas de fuerza si el Ejecutivo no ofrece «una recomposición acorde a la realidad».

Patagones es otro de los distritos donde el gremio municipal está presionando por un «refuerzo» para los salarios, que este año recibieron incrementos del 32% al 37% (los más beneficiados fueron los de las categorías más bajas).

En Villarino las paritarias se reabrirán a mediados del mes próximo, según lo acordado por el Ejecutivo con el gremio municipal. Hasta el momento, el aumento concedido a los trabajadores fue del 28,2%, porcentaje que el STM considera «escueto» para cubrir el aumento inflacionario. El gremio también pedirá avanzar con el convenio colectivo de trabajo y evaluar recategorizaciones.

En una situación similar se encuentran los trabajadores municipales en Adolfo Alsina, quienes en lo que va del año recibieron un aumento del 25,5%. Se negociará un refuerzo adicional del 10%.

Encaminados

En Coronel Dorrego, el Sindicato de Trabajadores Municipales y el Ejecutivo volverán a reunirse para definir el tercer y último incremento salarial de este año, que sería del 8 % o 9%.

Las fuentes consultadas indicaron que la posibilidad de un conflicto es «lejana», ya que en marzo el jefe comunal Raúl Reyes otorgó una suba del 12,5%; en abril, un aumento del 35% al 40% en las bonificaciones; en mayo, una suma fija de 500 pesos; y, en julio, un 15% al salario básico.

Otro distrito donde las negociaciones están muy bien encaminadas -al menos hasta el momento- es Tornquist. En lo que va del 2016, el STM obtuvo un aumento del 20%; para este semestre, el Ejecutivo ofertó un 15% al básico.

Las negociaciones salariales en Tres Arroyos también están casi cerradas. Este año los trabajadores de las categorías más bajas obtuvieron un aumento del orden del 40%, mientras que para los sueldos más altos la suba fue del 20% al 25%.

Fuente: La Nueva