El Gobierno Nacional firmó el contrato para la finalización del Tramo IV de la ampliación de la Cuenca del Río Salado y la megaobra pública iniciada hace más de 20 años empieza a transitar su fase final. Una vez concluída, permitirá recuperar 8 millones de hectáreas productivas en 59 municipios.
Por: Martín Mazzoleni
El Plan Maestro Integral de la Cuenca del Río Salado que lleva adelante la Provincia de Buenos Aires desde el año 2000 dota de mayor ancho y profundidad al cauce del río a lo largo de 600 kilómetros para permitir el escurrimiento ante crecidas y minimizar el efecto perjudicial de los desbordes.
En diálogo con Todo Provincial, el subsecretario de Recursos Hídricos de la provincia de Buenos Aires, Guillermo Jelinski, explicó: «La obra del Salado tiene como principal objetivo recuperar tierras productivas. Estamos terminando el cauce principal, especialmente el tramo IV que lo agarramos en un 9% y ya lo estamos concluyendo».
Este viernes, la Secretaría de Obras Públicas de la Nación firmó el contrato de obra por 26.737 millones de pesos con las empresas encargadas de llevar adelante la etapa 2 del Tramo IV de la obra. Mientras tanto, el gobierno bonaerense avanza con la gestión del financiamiento internacional para iniciar el Tramo V, último del cauce principal.
Las empresas adjudicatarias de las nuevoas obras son Centro de Construcciones S.A; Pentamar S.A.; José J. Chediack S.A.I.C.A.; Ecodyma Empresa Constructora S.A.; Dragados y Obras Portuarias S.A; y Sabavisa S.A.
Las mismas trabajarán en el tramo del Río Salado comprendido entre el cruce con Ruta Nacional Nº 205, en el Partido de Roque Pérez, y la localidad de Ernestina, ubicada en el partido de 25 de Mayo.
El contrato incluye la realización de obras complementarias como la readecuación de los los gasoductos General San Martín, NEUBA I y NEUBA II que se encuentran atravesando la traza.
Sobre el futuro de la obra, Jelinski adelantó: «Estamos haciendo el proyecto para inciar el tramo V, el último que queda, entre Junín y Bragado. Estamos trabajando con el Banco Europeo de Inversión para recuperar el crédito que se había perdido en la gestión anterior».
Una vez finalizada esta mega obra del Río Salado se recuperarán más de 8 millones de hectáreas productivas y se mejorará la protección de muchas localidades ante inundaciones. La Cuenca atraviesa a 59 municipios, a través de sus 170.000 km2 de superficie y los 700 km de longitud.
Sobre los beneficios para el campo, el funcionario destacó: «El área productiva recibe una mejora increíble, hay campos que eran aprovechables en un 10% que ahora lo serán en un 90 o en un 100% y además mejoraron la calidad del suelo porque se rellenaron con el refulado del cauce».
«Hay campos que eran aprovechables en un 10% que ahora lo serán en un 90 o en un 100%»
El subsecretario de Recursos Hídricos explicó una vez concluída la ampliación del cauce principal deberán comenzar las obras secundarias para llegar a cada distrito con canalizaciones. «Las mismas se deberán realizar con controles para evitar drenes que generen una bajante en tiempo de sequías», señaló el funcionario.
En ese marco, detalló que pronto comenzará un estudio financiado por el Banco Mundial denominado «análisis de humedales de la Cuenca del Salado» que permitirá identificar cuáles pueden ser las zonas de conflicto en época de bajante.
La traza del Río Salado se desarrolla de oeste a este en el centro norte de la provincia de Buenos Aires, y en su trayectoria hacia su desembocadura en la Bahía de Samborombón, se encuentran las ciudades de Junín, Roque Pérez, Alberti, General Belgrano y Villanueva, tratándose del área de mayor producción agropecuaria de la Provincia de Buenos Aires.
El ingeniero hidráulico y civil señaló que la obra del Río Salado «no evitará inundaciones sino que mejorará el drenaje de la cuenca que es muy nueva en términos geológicos y no ha podido diagramar un cauce franco y profundo».
«El agua ya no estará 6 meses, las ciudades estarán protegidas y se recuperarán 8 millones de hectáreas productivas»
Y agregó: «Sólo se aceleran los tiempos de la naturaleza profundizando y ensanchando el cauce pero la inundación lo va a tapar. La diferencia es que con este plan maestro, el agua ya no estará 6 meses, las ciudades estarán protegidas y se recuperarán 8 millones de hectáreas productivas».
«El goberbador Axel Kicillof acompaña al sector productivo en las buenas y las malas. Se generaron recursos directos para ayudar a mitigar la sequía y ni hablar de la inversión en caminos rurales que es hístorica», concluyó.