El Servicio Meteorológico Nacional emitió alertas amarillas por tormentas en casi toda la provincia de Buenos Aires y en Capital Federal. El sábado, las tormentas se extenderían a las provincias de Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe, Santiago del Estero, parte de Chaco y Salta. Aunque los meteorólogos niegan su existencia, para muchos esta será la «tormenta de Santa Rosa» del 2022.
Buenos Aires estaban bajo alerta amarilla por tormentas, mientras que en gran parte de la Patagonia se esperan vientos del sector oeste con velocidades entre 40 y 65 kilómetros por hora con ráfagas entre 80 y 100 kilómetros por hora.
Alerta amarilla por tormentas para este viernes
Según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), en Capital Federal y el AMBA se prevén tormentas para esta tarde, noche y mañana por la mañana que pueden estar acompañadas por fuerte actividad electrica, intensas ráfagas, caída de granizo y abundante caída de agua en cortos periodos.
Se estiman valores de precipitación acumulada entre 20 y 40 milímetros, por lo que se recomendó a los pobladores evitar actividades al aire libre mientras rija la alerta, no sacar la basura y retirar objetos que impidan que el agua escurra.
Alerta por tormentas para el sábado
En la provincia de Buenos Aires, la alerta por fuertes tormentas rige para el norte y centro, parte de la costa atlántica y el conurbano bonaerense. El sábado, las tormentas alcanzarían también a los distritos del sur bonaerense.
Además, el centro y la costa bonaerense están bajo alertas amarillas por viento. Según este pronóstico, el área será afectada por vientos del sector sur con velocidades entre 30 y 50 km/h, con ráfagas que pueden alcanzar los 70 km/h.
Alertas por viento para el sábado
Una buena noticia es que la zona del delta del río Paraná, afectada hace semanas por incendios, se encuentra bajo alerta por intensas lluvias.
¿Existe la «Tormenta de Santa Rosa»?
En 1615, en la ciudad peruana de Lima, una religiosa beata conocida como Rosa (Isabel Flores de Oliva, 1586-†1617), encabezó una oración popular ante el posible desembarco de naves de holandeses que ya habían asaltado el puerto vecino de El Callao. Sin previo aviso, una gran tormenta impidió a las embarcaciones acercarse a tierra y de esta manera, la ciudad de Lima quedó salva. Los creyentes comenzaron a atribuir la presencia de la tormenta al poder místico de Rosa.
Esta leyenda se popularizó en Argentina, especialmente en la zona del Río de la Plata, en Córdoba y en la región de Cuyo. En la provincia de Mendoza, uno de sus departamentos lleva su nombre, pese a que es una región realmente seca, y es muy poco frecuente que la tormenta se produzca allí.
Si bien se espera que la tormenta de Santa Rosa sea el 30 de agosto, fecha de la patrona, de acuerdo a registros del Servicio Meteorológico Nacional Argentino(SMN) desde 1906, en sólo nueve oportunidades la tormenta coincidió con esa fecha.
De todos modos, los meteorólogos realizaron estudios que niegan que las tormentas desatadas en ese período sean las más intensas.
Asimismo, un análisis estadístico realizado para la Ciudad de Buenos Aires entre los años 1870 y 2004 reveló que sólo en el 12 por ciento de los casos se pudieron verificar tormentas entre los cinco días antes y los cinco días después del 30 de agosto.
Una cuestión climatica
Según los meteorólogos, durante el invierno no suelen ocurrir tormentas dado que, para su desarrollo, se requiere la concurrencia de ciertas condiciones atmosféricas y energéticas que son más propias de la primavera y el verano.
Sin embargo, al aproximarnos al equinoccio de primavera del Hemisferio Sur, el acercamiento paulatino de la Tierra al Sol produce importantes cambios en la circulación atmosférica regional para fines de agosto.
La presencia de aire cálido y húmedo proveniente del norte, sumado al aumento de la radiación solar sobre el suelo y a la entrada de perturbaciones sinópticas desde el oeste, puede dar lugar a la aparición del fenómeno de tormenta al final del invierno, en fechas cercanas al 30 de agosto.
Eso explicaría la regularidad del fenómeno y que por la fecha en que se produce sea atribuido a Santa Rosa de Lima.