Luego de conocerse un intento frustrado para tomar nueva deuda con el Banco Provincia a través de una operación cruzada con el Banco Nación, el gobierno bonaerense mandó al directorio del Bapro una nota que solicita el canje de bonos por más de 4 mil millones de pesos que vencían en diciembre de este año para que tengan como nueva fecha de cancelación dentro de 12 meses.
Este viernes, el presidente del Banco de la Provincia de Buenos Aires, Juan Curutchet, presentó ante el directorio una nota firmada por el ministro de Economía bonaerense, Damián Bonari, que solicita el canje de bonos con vencimiento original para el 6 de diciembre próximo por un nuevo título con vencimiento dentro de exactamente 12 meses, por lo se tendrá que hacer cargo el próximo gobierno.
La nota justifica el pedido en “la volatilidad financiera que impide el acceso de la Provincia al mercado de deuda”. Los representantes del oficialismo aprobaron el pedido mientras que el resto expresó su rechazo y ahora pasó a comisión dentro del Banco.
Desde la oposición advierten que la medida se da en un marco de “mucha preocupación” respecto a la necesidad de caja del estado provincial para llegar a fin de año. Aunque no hay información exacta, se estima que la provincia tiene una necesidad bruta unos 100 mil millones de pesos hasta enero de 2020 para hacer frente a los pagos de salarios, jubilaciones y deudas.
“Basicamente la gobernadora Vidal le pide a Curutchet que el banco le refinancie deudas. El pedido demuestra las serias dificultades que enfrenta la Provincia en términos financieros”, advirtieron.
A principios de año, el gobierno provincial invirtió gran parte de sus ahorros financieros en Letras del Estado Nacional, tanto en pesos como en dólares, que luego fueron “reperfiladas” hacía 2020. Este problema se agudizó con las medidas tomadas por el presidente de rebajar impuestos coparticipables como el IVA.
“Cuatro años de timba financiera en el BAPRO limitaron seriamente la capacidad del banco para asistir al Tesoro Provincial, tanto en términos financieros como legales. Más allá de las presiones, no hay forma de que el banco responda a estos pedidos, salvo en el caso de que sus directivos decidan exponerse a consecuencias penales”, remarcaron desde la oposición.
Horas antes de hacerse público este documento, se supo de un intento del gobierno bonaerense para solicitar un préstamo de unos 6 mil millones de pesos al Bapro, algo impedido por la carta orgánica de la entidad ya que el Estado provincial aún tiene deuda sin cancelar.