Tras 20 semanas sin nuevos casos, el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires anunció el cierre del brote de sarampión que durante este año afectó a 21 personas en territorio bonaerense. El control de la enfermedad fue posible gracias a un conjunto de medidas que incluyeron vigilancia epidemiológica, búsqueda de contactos estrechos, campañas de vacunación y comunicación, capacitación de equipos de salud y una estrecha articulación con el sistema educativo.
Cuando se detectaron los primeros casos, la cartera sanitaria provincial activó una batería de acciones previstas para la contención de brotes. El virus del sarampión tiene la particularidad de permanecer en el aire hasta dos horas después de que una persona infectada haya abandonado un ambiente, lo que lo convierte en uno de los virus más contagiosos del mundo. De hecho, gran parte de los contagios registrados este año se produjeron en salas de espera de centros de salud.
Durante 2025, hasta el 5 de noviembre, se notificaron en la provincia 1.985 casos sospechosos de enfermedad febril exantemática. De ese total, 21 fueron confirmados como sarampión, 1.919 fueron descartados y 45 permanecen en estudio.
Dónde se originó el brote
De los 21 casos confirmados, 20 estuvieron vinculados a un mismo brote que se originó a partir de una persona que contrajo la enfermedad en el exterior —un caso importado— y que realizó una consulta médica en la Ciudad de Buenos Aires. Desde allí, el virus se extendió a vecinos y vecinas de los municipios del sur del Área Metropolitana de Buenos Aires, afectando a Florencio Varela, Berazategui, Quilmes, Almirante Brown, Avellaneda, Lanús y Presidente Perón (Regiones Sanitarias VI y XI).
Además, se confirmó otro caso importado en el municipio de Moreno (Región Sanitaria VII), aunque sin que se produjeran contagios secundarios.
Campaña de vacunación
Una de las medidas centrales para contener el brote fue una campaña focalizada de vacunación en los municipios del área metropolitana. En total, se aplicaron 47.981 dosis “0” de la vacuna triple viral (a niños y niñas de 6 a 11 meses) y 155.616 dosis adicionales a la población de 13 meses a 4 años.
Estas inmunizaciones se sumaron a las que ya integran el Calendario Nacional de Vacunación, que garantiza vacunas gratuitas y obligatorias, con el objetivo de cortar la circulación del virus.
Confirmación del fin del brote de sarampión
Según los epidemiólogos, el cierre de un brote puede establecerse cuando transcurren tres períodos máximos de incubación sin que aparezcan nuevos casos, lo que equivale a 12 semanas. En la provincia ya pasaron más de 20 semanas desde que la última persona infectada presentó síntomas, por lo que se considera oficialmente concluido.
Sin embargo, las autoridades sanitarias bonaerenses insistieron en la necesidad de mantener la vigilancia epidemiológica y reforzar las coberturas de vacunación. “Es importante mantener la sensibilidad de la vigilancia en todo el territorio, continuar con la vacunación para alcanzar y sostener coberturas óptimas y fortalecer los equipos para una respuesta rápida ante posibles nuevos casos”, remarcaron desde el Ministerio de Salud.
También señalaron que mantener el sarampión bajo control sigue siendo un gran desafío, debido a la circulación activa del virus en otras regiones del mundo.
Brotes en otros países
Durante 2025, varios países de América registraron brotes de sarampión. En la región, Paraguay, Bolivia y Brasil confirmaron casos, al igual que Belice, Perú y Costa Rica. En México se notificaron 5.160 contagios, Canadá registró 5.138 y Estados Unidos, 1.648.
Si bien en Argentina no se produjeron fallecimientos, en la región 18 personas murieron por sarampión durante este año.
Desde el Ministerio bonaerense destacaron que los equipos de salud deben notificar de inmediato cualquier caso sospechoso para activar las alertas, iniciar investigaciones epidemiológicas y desplegar acciones de bloqueo que prevengan contagios.
Seguimiento y control
Para detener la transmisión, el Ministerio de Salud de la Provincia realizó un seguimiento durante 30 días de 1.444 personas que habían sido contactos estrechos de los casos confirmados en salas de espera de establecimientos de salud de PBA y CABA.
También se identificaron y monitorearon más de 200 contactos familiares y laborales, y se controló a 232 residentes bonaerenses que estuvieron en contacto con personas infectadas en la Ciudad de Buenos Aires.
En paralelo, se efectuaron búsquedas activas de personas con síntomas mediante visitas domiciliarias y relevamiento en casi 4.000 viviendas y centros de salud.
El Ministerio también desplegó un amplio programa de capacitación para profesionales y equipos de salud, incluyendo a agentes del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA).
Los médicos y médicas fueron entrenados específicamente en diagnóstico, atención y vigilancia epidemiológica del sarampión, y se puso en marcha una línea de comunicación a través del chatbot de Mi Salud Digital Bonaerense, que permite la derivación a Telemedicina.
Además, se creó una red de derivación de casos sospechosos hacia los referentes regionales y locales, para garantizar la toma de muestras en domicilio o en aislamiento dentro de consultorios de febriles exantemáticos.
Trabajo con la comunidad educativa
Finalmente, el Ministerio complementó su estrategia sanitaria con campañas de comunicación en redes sociales y medios de difusión masiva, en articulación con la Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia, para sensibilizar a la comunidad educativa y fomentar la vacunación.
Gracias a estas acciones combinadas y a la rápida respuesta de los equipos sanitarios, la Provincia de Buenos Aires logró contener el brote y mantener el control del sarampión, una enfermedad que sigue siendo una amenaza global pero que, por ahora, ha sido detenida en territorio bonaerense.