En el último fin de semana largo del año, viajaron 1,2 millones de turistas, que movilizaron $37.304 millones dentro de la Argentina. Los datos de estos cuatro días generan en el sector turístico buenas expectativas para la temporada y anticipan al menos repetir las cifras del verano 2022.
Mar del Plata, el Partido de La Costa, Puerto Iguazú, la Quebrada de Humahuaca, Villa Carlos Paz, la ciudad de Mendoza, San Carlos de Bariloche y El Calafate, fueron algunas de las ciudades más concurridas, de acuerdo con el informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), que suele medir el movimiento turístico en el país.
En los siete fines de semana largos del año, viajaron 12.479.534 turistas y dejaron un impacto económico directo de $255.124 millones, según los datos de Came. “El 2023 va a marcar un récord para el sector”, destacó el ministro de Turismo, Matías Lammens, y anticipó que “con el impulso de la llegada de millones de turistas del extranjero, el 2023 va a ser un año récord para el sector”.
Último fin de semana largo: ocupación hotelera en la provincia de Buenos Aires
-La Costa: 90%
-Mar del Plata: 85%
-Villa Gesell: 81%
-Pinamar: 80%
-Tandil: 81%
-Lobos: 80%
-Tigre: 75%
CAME relevó que los viajeros realizan un gasto diario por persona de $8.772, un 8,3% superior al último fin de semana largo, en noviembre.
El último feriado para esta fecha había sido en 2020: frente a ese año, que hubo poco movimiento por la pandemia, viajaron 130% más de turistas, y el impacto económico, medido a precios reales, se multiplicó por cinco.
En la provincia de Buenos Aires, con temperaturas que superaron los 30 grados, las localidades de la costa vivieron un anticipo de lo que será la temporada de verano, con un intenso arribo de visitantes y rutas muy transitadas. A Mar del Plata, se estima que el jueves ingresaron más de 1.000 vehículos por hora y la ocupación de las plazas hoteleras y balnearios superaron el 80%.