El PCR, partido de izquierda que integra el Frente de Todos, presentó una propuesta de «Reforma Monetaria» que propone crear el «Peso Malvinas Argentinas» que equivaldría a mil pesos actuales. Los depósitos que superen el millón de pesos solo serían devueltos manteniendo esa equivalencia «en la medida que justifique su necesidad de consumo por salud, vivienda o cualquier otro consumo no especulativo”, sino habría una quita de la mitad.
«No somos economistas académicos, la historia de lucha de nuestro pueblo nos ha llevado a esto”, aseguró Jorge Smith, más conocido como “El Alemán”, un dirigente histórico de los trabajadores de Astillero Río Santiago, que presentó este proyecto en el Edificio Karakachoff de la Universidad Nacional de La Plata, apoyándose en gráficos y cuadros, elaborados por Ezequiel Antognini, también trabajador del ARS, secretario de Formación ATE Ensenada y dirigente de la Agrupación Celeste CCC del ARS.
La charla estuvo dividida en dos partes «¿Qué es la inflación?» analizando las causas de este “mal que parece imbatible, que cada vez se hace más grande”, y cómo derrotarla con una «solución a favor del pueblo y de la patria».
Smith dijo que «este aumento desparejo, anárquico de los precios se denomina en el lenguaje de las ciencias económicas: distorsión de los precios relativos”. Entre los factores, analizó cómo suben los precios de las mercancías tanto desde la oferta como desde la demanda; la devaluación del peso argentino frente al dólar; la emisión de dinero, así como la emisión de bonos o letras por parte del Estado en la toma de créditos.
“Otro factor que desestabiliza es la emisión de dinero para pagar la ilegítima y fraudulenta deuda externa y la deuda pública. Es decir, toda esa plata que se emite dándole a la maquinita y que no se utiliza para producir”, apuntó y habló también del dinero que va a la corrupción (como la subfacturación y la sobrefacturación en el comercio exterior), el lavado de dinero, el narcotráfico y la renta parasitaria que se llevan los grandes terratenientes.
“Por el lado de la oferta, el factor que desestabiliza es la dificultad de producir todo lo que se necesita, porque la Argentina es un país dependiente y está oprimido, encorsetado y frenado para producir por los imperialismos, los monopolios y los terratenientes”, expresó Smith.
Y remarcó: «Para combatir la inflación es imprescindible atacar simultáneamente los diversos aspectos del problema, con propuestas como las que planteamos en las Diez Medidas, pasando a detallar la propuesta de reforma monetaria».
Tras una introducción sobre la deuda externa y el acuerdo con el FMI, Smith se explayó en una “reforma monetaria popular que «saque esos fondos de la especulación financiera y oriente el uso del dinero y las divisas hacia la mejora de los salarios y las jubilaciones, precio sostén en origen a las producciones regionales, crédito para los pequeños y medianos productores del campo y las ciudades, así como fondos para la industria nacional y la defensa para la soberanía”.
La propuesta de cambio de moneda arranca con la emisión de “nuevo tipo de billete denominado peso “Malvinas Argentinas” con una equivalencia de: un peso “Malvinas Argentinas” igual a $1000 actuales, es decir se cambiará $1000 actuales por un peso Malvinas Argentinas”, con 15 días de plazo para el cambio.
Sobre los pesos depositados “se devolverán: por cada titular individual, hasta 1 millón de pesos actuales, la totalidad de su equivalente en $1000 “Malvinas Argentinas”; si la tenencia supera ese valor, el resto se le restituirá en esa equivalencia por la nueva moneda, en la medida que justifique su necesidad de consumo por salud, vivienda o cualquier otro consumo no especulativo”.
La propuesta incluye cambiar los títulos especulativos con una equivalencia de un peso Malvinas Argentinas por $2000 actuales. “En cuanto a las leliq (letras de liquidez) que los bancos necesiten efectivizar en moneda para devolver depósitos de sus clientes, se efectivizarán en su equivalencia de 1 a 1000 si van a la producción o salarios, el resto se cambiará 1 a 2000″, detalló.
El compañero Smith finalizó planteando: “Esta reforma monetaria debe ser acompañada de otras medidas: nacionalización del crédito y el comercio exterior para tener instrumentos que permitan el uso total del dinero y de las divisas para la producción terminando con la especulación de las grandes entidades financieras y de las exportadoras, de retener los dólares para forzar su devaluación y con los negociados de la subfacturación y sobrefacturación que realizan también los monopolios exportadores o importadores”.