La CGT expresó su «profunda preocupación» ante los anuncios del presidente electo Javier Milei, quien ratificó que producirá un profundo ajuste fiscal, paralizará la obra pública y probablemente no abone el aguinaldo a los estatales, entre otras medidas, y afirmó que mantendrá «la guardia alta» y que el movimiento obrero «no dará ni un paso atrás».
La «mesa chica» ampliada de la CGT deliberó en la sede nacional de la Unión Obrera de la Construcción (Uocra), en la Avenida Belgrano al 1800 de la ciudad de Buenos Aires y sus dirigentes sostuvieron luego del encuentro que hubo «un consenso absoluto» respecto de «la preocupación existente ante los anuncios de Milei esta semana».
«Hay preocupación por esos anuncios de esta semana. Además, existe una muy fuerte corriente de consenso interno para profundizar y sostener hoy más que nunca la unidad de la central obrera, lograda hace dos años», dijeron las fuentes gremiales a Télam.
Los dirigentes ratificaron la necesidad de «unidad» por sobre todas las cosas ante los anuncios de ajuste y de cuestionamiento a los derechos laborales y salariales formulados por el presidente electo por La Libertad Avanza, indicaron los voceros gremiales.
«Nadie, absolutamente nadie que integra el consejo directivo de la CGT o conduce un gremio se pintará la cara antes de tiempo. Pero sí será preciso mantener bien alta la guardia y monitorear las medidas que el nuevo gobierno adopte desde el 10 de diciembre próximo, en especial si perjudican los puestos de trabajo, el ingreso familiar y los derechos socio-laborales conquistados», coincidieron los voceros gremiales en declaraciones a esta agencia.
Los gremialistas, además, ratificaron en el encuentro de varias horas en la Uocra, que conduce Gerardo Martínez, el sostenimiento y la vigencia de la negociación colectiva paritaria «como bandera irrenunciable para garantizar el poder adquisitivo salarial».