La senadora provincial y secretaria general del Partido Justicialista, Teresa García, brindó detalles sobre el encuentro nacional de autoridades partidarias que tuvo lugar esta semana en la sede del PJ y anticipó el cronograma de acciones políticas y movilizaciones que culminarán el próximo miércoles con una masiva marcha bajo la consigna “Argentina con Cristina”. Según explicó, el objetivo es respaldar a la expresidenta frente a la definición judicial sobre su situación en la causa por presunto encubrimiento.
La reunión contó con la participación de los presidentes del PJ de todas las provincias, excepto Córdoba, y del Consejo Nacional del Partido Justicialista. También estuvieron presentes los excandidatos presidenciales del frente, Sergio Massa, Juan Grabois y Guillermo Moreno, así como referentes de partidos aliados: Carlos Heller (Solidario), Martín Sabbatella (Nuevo Encuentro), Carlos Castagneto (Colina) y Jorge Rivas (PS).
“No fue una reunión de gobernadores. La de los mandatarios provinciales será el martes a las 18. Quintela estuvo en calidad de presidente del PJ de La Rioja, y luego fue a visitar a Cristina”, aclaró García ante versiones que cuestionaban la ausencia del gobernador bonaerense Axel Kicillof.
En cuanto al cronograma previsto, la dirigente detalló una agenda intensa que incluye encuentros con movimientos sociales, intendentes, expresidentes de Cancillería y periodistas extranjeros, entre otros. La semana culminará con la marcha del miércoles, cuyo objetivo es claro: “Acompañar a Cristina y garantizar que vuelva a su casa en paz”.
García remarcó que la movilización busca evitar cualquier tipo de morbo o humillación contra la exmandataria.
“El miércoles nos movilizamos porque queremos que después de Comodoro Py, Cristina vuelva a su casa. No vamos a admitir ninguna humillación ni morbo de quienes tienen que llevar adelante la medida. Cristina tiene una enorme dignidad política y no vamos admitir una de esas jugaditas que acostumbran hacer contra el peronismo. La mejor manera de garantizarlo será con una enorme movilización”, explicó García.
También denunció la existencia de operaciones mediáticas que buscan generar zozobra, y apuntó directamente a sectores del Poder Judicial: “Hay una cadena de obediencia de vida entre algunos jueces federales y los grupos Clarín, AEA y La Nación”.
En cuanto al panorama electoral, García fue enfática: “Una vez que Cristina esté en su casa, habrá que tomar decisiones políticas urgentes. Estamos muy justos con el cronograma. El 9 de julio hay que presentar los frentes y eso requiere determinaciones previas”. Reconoció que Grabois planteó la idea de discutir una posible abstención, aunque aclaró que no se formalizó como propuesta concreta.
Respecto a la elección en la provincia de Buenos Aires, negó que el PJ haya presionado a Kicillof para unificarla con la nacional. “No se lo pedimos. Él tomó la decisión y nosotros accedimos a reorganizarnos”, dijo. No obstante, advirtió que el ajuste de fechas genera un desafío logístico complejo: “Son ocho elecciones en una y hay que organizar todo eso”.
García confirmó que estuvo presente Máximo Kirchner, en su rol de presidente del PJ bonaerense, y explicó que Cristina dejó establecido un mandato político: reunir a la mesa de intendentes de Kicillof con la del espacio kirchnerista.
En relación a la falta de participación del PJ cordobés, lamentó que la conducción partidaria local no se haya sumado, aunque destacó que los movimientos sociales, estudiantiles y sectores del peronismo están “muy movilizados”: “Podrán cerrar las puertas del partido, pero no las de la calle”, sentenció.
Por último, anunció que se promoverá la formación de comandos locales de organización política, con el objetivo de contener a “la enorme cantidad de gente silvestre que quiere participar y no sabe cómo”. “Nosotros tenemos la responsabilidad de ordenar. Hay que celebrar que más allá de las diferencias, el peronismo se está reencontrando en su casa”, concluyó.