A partir de una campaña impulsada por RELEA (Red Local de Estudios Agroecológicos Baradero-San Pedro), la Red Federal de Docentes por la Vida, Baradero Verde y Acción ambiental, se analizaron muestras de orina de alumnos y docentes de la Escuela N°8 de Baradero. Los resultados de laboratorio indicaron que casi la mitad presentaba gligosato y AMPA en orina.
La directora del establecimiento integrante de Acción Ambiental Baradero, Paola Kruger, habló con Radio Provincia y expresó: “Llevamos ocho muestras de orina al laboratorio Fares Taie de Mar del Plata y el 40% dieron que había Glifosato y AMPA (metabolito aminofosfonato ácido aminometilfosfónico), tanto en docentes como de los alumnos”.
“Esto es una foto de un momento porque el glifosato dura 72 horas en orina. Este estudio lo hicimos en abril, época que no hay tantas fumigaciones. Ahora nos están fumigando todo el tiempo y cada vez que llega la época de fumigaciones tenemos la mitad de la matrícula con bronco espasmos y alergias», advirtió.
“No tenemos que tener venenos en nuestro cuerpo porque esta sustancia es para la producción. Esto demuestra que en las fumigaciones existen derivas, porque, por ejemplo, los docentes no vivimos en el campo y sin embargo tenemos presencia de glifosato”, comentó.
La Escuela N°8 de Baradero está ubicada a 20 kilómetro del casco urbano. “Esta es una realidad que se repite en muchas escuelas”, advirtió y agregó: “Hay una vulneración de los derechos de las infancias”.
En 2018, RELEA presentó un proyecto de ordenanza para regular el uso de agrotóxicos en Baradero. “He realizado varias denuncias porque nos han fumigado en el recreo, cuando llegaban los chicos a la escuela, hubo casos de intoxicación aguda, y al no haber una ordenanza, no hay nada que pueda sancionar esta situación”, denunció la docente.
Kruger denunció que «la mayor problemática son las fumigaciones terrestres, áreas son pocas pero hay. El problema es que fumigan en momentos y condiciones que no se puede hacer”.
A partir de esta campaña se está analizando el agua y la tierra de Baradero con el objetivo de demostrar que las fumigaciones son una problemática social para toda la ciudad.
«La Sociedad Rural también presentó un proyecto de ordenanza, donde el mayor conflicto fue el metraje de las zonas de exclusión de la fumigación. Ellos pedían 25 metros pero sabemos que a esa distancia el veneno llega. Nosotros pedimos 500 metros, pero con una progresión, para que, a medida que pasa el tiempo, poder ir extendiendo esa zona, con un cambio en la forma de producir para poder proteger a nuestros niños”, remarcó.
A partir de distintas manifestaciones, en 2021 el municipio llamó a una mesa de trabajo con diferentes actores y la coordinación de la Secretaría de Ambiente del municipio. Sin embargo, no hubo acuerdo en la distancia mínima de exclusión para las fumigaciones.
“Ahora, a partir del resultado de los análisis de orina, el municipio presentó un borrador del proyecto que van a presentar en el Concejo Deliberante, pero no estamos de acuerdo porque no es una ordenanza que tenga en cuenta la salud. Proponen 250 metros de exclusión más 50 metros de zona de amortiguación, pero ahí se puede fumigar, y los resultados de los análisis de orina justo son alrededor de un campo que está a más de 300 metros de la escuela, son casi 1000 metros y llega”, concluyó.
Cabe recordar que en 2018, el gobierno bonaerense dictó una resolución que flexibilizaba las aplicaciones de agroquímicos en toda la provincia. La normativa fue suspendida por la actual gestión que convocó a organismos públicos bonaerenses a que sean parte de una mesa de trabajo con el fin de coordinar la implementación y evaluación de políticas públicas relativas para la aplicación de agroquímicos.