El pasado viernes, el Municipio de San Nicolás encendió su arbolito de Navidad, realizado con 36 esferas de hierro iluminadas con led. Tiene 20 metros de altura y es el árbol de Navidad más grande del país. Además busca recuperar la leyenda de San Nicolás, el verdadero Papá Noel de la historia.
Este año, el Municipio de San Nicolás decidió apostar a lo grande para convertirse en un escenario de celebración de la Navidad en Argentina. Por ello, preparó su Paseo Costanero y montó un árbol realizado íntegramente en hierro, con 36 esferas montadas sobre un poste central.
El resultado es una verdadera obra de arte de 20 metros de alto y 8 de diámetro que se puede ver desde la Costanera Alta y desde las islas del río Paraná, que es por su tamaño el más grande del país, seguido por el de Córdoba y Bariloche.
Al mismo tiempo, el Municipio lanzó una campaña para recuperar la leyenda de San Nicolás de Bari, patrono de la ciudad, quién es el verdadero Papá Noel de la historia. Cuenta la leyenda que San Nicolás fue quién, para ayudar a un padre viudo a salir de la pobreza junto a sus tres hijas, comenzó a colocarles monedas de oro en las medias que dejaban secando en la chimenea, una figura muy representativa del Papá Noel actual.
Nicolás, luego devenido en Santo, nació en realidad en Mirra, y luego llegó a Bari, donde se encuentran sus restos. Allí lo beatificaron y convirtieron en San Nicolás de Bari. Heredero de una fortuna, ocupaba su tiempo ayudando a los niños pobres. Su figura se hizo muy fuerte en la Alemania creyente, donde lo llamaron Sankt Nikolaus, luego Santa Claus, nuestro Papá Noel.