El gobierno nacional dispuso el cierre de 20 oficinas del SENASA en todo el país, 6 de las cuales están ubicadas en territorio bonaerense. La motosierra avanza en organismos vinculados a la producción y la sanidad.
La medida firmada por el presidente del SENASA, Pablo Cortese, ya fue publicada en el Boletín Oficial.
En la provincia de Buenos Aires cerrarán las sedes de Berisso (se integrará con La Plata), Capilla del Señor (se une al de San Andrés de Giles), Coronel Rosales (pasa a Bahía Blanca), Henderson (pasa al de Daireaux), San Nicolás (se integra con Ramallo), y la del Mercado de Hacienda de Cañuelas que se integra con Palermo.
En la provincia de Córdoba cerrarán las oficinas del SENASA de Alta Gracia, General Levalle, Hipólito Bouchard, Villa Huidobro, Salsacate y Villa del Totoral. En la provincia de Corrientes, cierran General Alvear, Itatí, San Cosme y San Luis del Palmar. En tanto, en Misiones dejará de existir las sedes de Aristóbulo del Valle y en Salta la de Salvador Mazza. En San Luis, cierra SENASA Nogolí y en Santa Fe la oficina de Villa Cañas.
Las autoridades de SENASA justificaron la medida de ajuste bajo el pretexto de que “las oficinas que se integran están a pocos kilómetros de las que pasan a contenerlas y el principal motivo es el poco movimiento que tenían», por lo que «no justificaba sostenerlas”.
El Senasa es el organismo descentralizado y autártico encargado de ejecutar las políticas nacionales en materia de sanidad y calidad animal y vegetal e inocuidad de los alimentos de su competencia, así como de verificar el cumplimiento de la normativa vigente en la materia.
También es de su competencia el control del tráfico federal y de las importaciones y exportaciones de los productos, subproductos y derivados de origen animal y vegetal, productos agroalimentarios, fármaco-veterinarios y agroquímicos, fertilizantes y enmiendas.