La ministra de Hábitat y Desarrollo Urbano de la provincia de Buenos Aires, Silvina Batakis, aseguró “la mortalidad en términos generales va a crecer mucho respecto de 2023 y 2022″ por la falta de acceso a medicamentos y alimentos.
“Cuando tenés un adulto que empieza a tomar un remedio día por medio te va a aumentar la tasa de mortalidad, cuando tenés pacientes oncológicos que no pueden acceder a sus remedios, la mortalidad va a crecer”, expresó la funcionaria.
Y advirtió: “Hay pacientes diabéticos que ya no pueden acceder a los medicamentos que antes conseguían y vemos que se les tiene que amputar una pierna. Esto es solo una muestra de las consecuencias de las políticas actuales”.
Un informe reciente de UNICEF relevó una reducción del 54% en el consumo de frutas y verduras, y un aumento del 24% en la ingesta de harinas entre niños, niñas y adolescentes (NNyA). En base a una encuesta de ese organismo de Naciones Unidas de mayo, los ingresos del 48% de los hogares argentinos no alcanzan para cubrir los gastos mensuales corrientes con una diferencia de 7 puntos más con respecto al año anterior, cuando así lo manifestaban el 41%, y de 15 puntos más si la referencia es 2022, cuando eran el 33 por ciento.
“Afecta a esa población, pero también al futuro de todos los argentinos, porque esos niños y adolescentes que hoy no están recibiendo nutrientes suficientes tendrán dificultades para adquirir conocimientos”, advirtió Batakis.
De acuerdo al reporte de Unicef, el 76% de los encuestados reveló que come menos carne (en 2023 habían respondido afirmativamente el 64%); lácteos (57% en el período de la encuesta, cuando el año pasado lo expresaba el 44%) y frutas y verduras (el 58% dice que consume menos, contra el 44% del año pasado). Significa -según UNICEF Argentina- que alrededor de 10 millones de chicas y chicos comen menos de estos nutritivos alimentos.
La titular del ministerio de Hábitat bonaerense también alertó que ese deterioro produce “una exclusión muy fuerte del sistema educativo que se está produciendo a través de la pérdida de calidad en los alimentos”.
“Muchos chicos están saltándose una comida por día y eso no solo les afecta directamente, sino que vulnera el desarrollo de toda la sociedad argentina”, apuntó la ministra.